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                entre estos últimos y las autoridades de distrito, algo que debió repro-
                ducirse en los núcleos rurales dependientes de las cabeceras urbanas
                y que también se dio en los territorios de órdenes, donde los goberna-
                dores y alcaldes mayores supervisaron el alistamiento en todas las lo-
                calidades de sus respectivos partidos .
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                   Por lo demás, lo observado permite deducir una secuencia lógica de
                actuaciones que, en previsión de que pudiera aducirse desconocimien-
                to, comenzaba con el anuncio público de la realización del padrón. El
                que se elaboró en Ocaña en 1583 fue precedido del correspondiente
                bando, que corrió a cargo del alguacil de la villa, quien dio cuenta de
                su convocatoria

                en la calle Mayor de la dicha villa (…) y en la plazuela que diçen del Duque y
                a la puerta de Murcia y en las tendeçuelas del Villar y a la esquina de las
                Casas  de  Pedro  Alonso  Sanctana  y  cerca  de  la  iglesia  de  San  Martín,  a  la
                esquina de las casas del cura de san Martín y de Gabriel de Cepeda y en la
                plaçuela de la yglesia de san Juan y abaxo de la calle de sancta Catherina y
                ente los mesones y en otras partes desta dicha villa 64 .

                   Cumplido dicho trámite, el procedimiento más habitual consistió en
                reunir a los moriscos en algún emplazamiento público. En ocasiones, el
                lugar elegido fue el ayuntamiento; en otras la residencia de las autorida-
                des del partido, como ocurrió en el anterior ejemplo . No obstante, lo
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                más habitual es que el lugar elegido fuera una iglesia o ermita, momento
                en el que, a delegados de la justicia civil, escribano y superintendente de
                moriscos, solía unirse la figura de algún miembro del clero. A dicho es-
                quema se acoplaron, entre otros el ya mencionado padrón de Almodóvar
                del Campo (1589-1590) , los realizados en Albacete en 1573 y 1574  y
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                el que tuvo lugar ese mismo año en Almagro .
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                   63  Así se deduce del encargo que en 1576 se hizo al alguacil mayor de la gobernación
                de Quintanar, a quien se ordenó que «vaya a las dichas villas y cada una dellas y atento
                a todas cosas tome un traslado de la lista que en cada una dellas hubiere de los moriscos
                que en ellas se alistaron...». Ahn, Om, At, leg. 24678. 14.09.1576.
                   64  Ahn, Om, At, leg. 15648.
                   65  Ivi.
                   66  F.J. Moreno Díaz del Campo, Los padrones moriscos de la gobernación calatrava
                de Almodóvar a finales del siglo XVI cit., pp. 38 y 49.
                   67  A. Santamaría Conde, Albacete y la deportación general de los moriscos granadinos
                cit., pp. 52-53.
                   68  M.F. Gómez Vozmediano, Mudéjares y moriscos en el Campo de Calatrava cit., p. 134.



                Mediterranea - ricerche storiche - Anno XVII - Agosto 2020
                ISSN 1824-3010 (stampa)  ISSN 1828-230X (online)
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