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544 Martha Atzin Bahena Pérez
por ejemplo el consejero de Indias Diego de Cárdenas, quien participó
en la defensa de Cozumel y por sus servicios a la Corona española a
partir de 1632 se le otorgó la renta de encomienda del pueblo de
Chiapa de Indios, considerado el más poblado de la provincia.
Alegría se insertó en la sociedad local de la provincia de Chiapa sin
necesidad de casarse con alguna mujer descendiente de vecinos con-
quistadores y primeros pobladores de Ciudad Real. Su servicio al bien
común de la ciudad se basaba en el crédito que otorgaba a sus habi-
tantes. Además, al prestar dinero para hacer efectivo el pago de la fis-
calidad regia reproducía una parte importante de la autoridad real a
nivel local. Así pues, las acciones del teniente de oficiales reales sus-
citaron la cohesión necesaria para mantener a la ciudad como parte
de la monarquía católica y la insertaba en circuitos económicos más
amplios.
Como es de sospecharse, Diego de Alegría estrechó sus lazos con el
cabildo de la ciudad. El capitán Juan de la Tovilla y su hijo del mismo
nombre, quien era alférez, vincularon al teniente de oficiales con la
corporación capitular. Alegría les había prestado plata a los Tovilla
para que pujaran los tributos en almoneda. Además, contó a los indios
que tenían en encomienda de lo que resultaron veinte tributarios más
de los que contó el alcalde mayor Baltasar Muriel de Valdivieso para
cobrar el servicio del tostón . Cuando Diego de Alegría convaleció en
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su casa, el capitán de la Tovilla lo cuidó y veló ; como el teniente de
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oficiales reales no tenía herederos directos que residieran en la pro-
vincia, por no estar casado ni tener hijos, la familia Tovilla se aprove-
chó de tal circunstancia y se mantuvo cerca de nuestro personaje,
pues si llegaba a morir podrían hacerse de las riquezas del fallecido .
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Varias veces Diego de Alegría solicitó que se le diera un cargo en
otra villa o ciudad del reino de Guatemala, con el fin de ampliar sus
redes crediticias y comerciales. Sin embargo, el cabildo de Ciudad Real
buscó la manera de controlar su crédito y mantenerlo como residente
y vecino. Así, en el año nuevo de 1612 el cabildo nombró y eligió a
54 Testificación del capitán Juan de la Tovilla vecino de Ciudad Real para la probanza
de méritos y servicios de Diego de Alegría, en Ciudad Real Chiapa a 14 de mayo 1616,
Ivi, ff. 18v-19; Testificación del alférez real Juan de la Tovilla vecino de Ciudad Real para
la probanza de méritos y servicios de Diego de Alegría, en Ciudad Real Chiapa a 17 de
mayo 1616, Ivi, f. 28v.
55 Ivi, ff. 18v-19r, f. 28v.
56 Esto es parecido a las relaciones que encontró Simona Cerutti entre los vecinos
de Saboya y los considerados «extranjeros» por no tener familia a quien heredar legíti-
mamente, véase: S. Cerutti, El derecho de advenia y la construcción de los «extranjeros»
en la época Moderna (Estado de Saboya, siglo XVIII), «Revista Historia y Justicia», n. 2
(2014), pp. 1-18; S. Cerutti, Étrangers. Étude d’une condition d’incertitude dans une so-
ciété d’Ancien Régime, Bayard, París, 2012, p. 50.
Mediterranea - ricerche storiche - Anno XVIII - Dicembre 2021
ISSN 1824-3010 (stampa) ISSN 1828-230X (online)