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Defensa de la costa, captura y venta de esclavos norteafricanos en el Mediterráneo 351

del XVII a una cierta recuperación de la mano de obra de origen turco-
berberisco, con la progresiva desaparición de los excedentes de la
mano de obra de origen morisco post-rebelión. Ello determinó un
cierto repunte de los precios, hacia los 70 ducados por captura, como
comprobaremos más adelante.
Dado el beneficio económico que reportaban estas presas huma-
nas, no es de extrañar que estas fuesen también una fuente de litigios
y enfrentamientos entre los vecinos y el personal militar profesional
de la costa, amparados por corregidores y alcaldes mayores, de un
lado, y capitanes generales de otro, muy celosos de su jurisdicción y
competencias sobre los procedimientos de reparto, cobro y venta como
esclavos de los corsarios y piratas capturados por los integrantes del
sistema defensivo. Esta litispendencia de largo recorrido, en la que se
vieron inmiscuidos también los tripulantes de las escuadras de gale-
ras de España que iban en persecución de naves enemigas, cuenta
con una interesante casuística procesal que todavía está pendiente de
ser estudiada en profundidad .
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En las primeras décadas del siglo XVII los rebatos costeros, las ca-
balgadas y la captura de corsarios y piratas turco-berberiscos conti-
nuaron formando parte del día a día de las poblaciones del litoral del
Reino. No en vano, el caso de 1633, objeto de este estudio, se sitúa en
un contexto de intensificación de la ofensiva del corso sobre el sureste
peninsular, que afectó especialmente a las costas almerienses com-
prendidas entre el Cabo de Gata y la frontera con el Reino de Murcia.
Sabemos que el ascenso político de Alí Bitchiín dio nuevas fuerzas a
la marina argelina, con un notable incremento de los navíos corsarios
redondos de alto bordo y de escuadras fuertemente artilladas. Esto se
tradujo en una importante escalada del corso durante la década de
1630 en toda el área litoral del sudeste peninsular, coincidiendo con
el aumento de la autonomía de las regencias berberiscas frente al im-
perio otomano y con la materialización de una mayor colaboración en-
tre las regencias de Argel y Bizerta .
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El suceso ocurrió cuando al atardecer del lunes día 21 de febrero de
1633 tres naves turco-berberiscas se acercaron a la playa de los
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por esclavo sano vendido –uno de ellos, herido y mutilado, se vendió muy por debajo del
precio de mercado–, Ags, Ga, leg. 400, fol. 106r.
86 No obstante, hemos realizado algún acercamiento a dicha dinámica procesal en
dos trabajos. Para el siglo XVI, en: A. Jiménez Estrella, Poder, ejército y gobierno cit.,
pp. 295-301; para el XVII, en: A. Jiménez Estrella, Defensa y administración militar cit.
87 Así lo ha demostrado para el área levantina F. Velasco Hernández, Las galeras del
corsario Alí Bitchín y sus campañas de saqueo en las costas de Alicante y Murcia durante
la década de 1630, «Revista de Historia Moderna», 33 (2015), pp. 163-185.
88 Sobre estos dos términos, nos atenemos a la información contenida en el proceso.
Como solía ser frecuente en las fuentes de la época, tanto las autoridades militares y

Mediterranea - ricerche storiche - Anno XVIII - Agosto 2021
ISSN 1824-3010 (stampa) ISSN 1828-230X (online)