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384 David González Cruz
gestionar las transacciones comerciales que se efectuaban con los
países europeos y, en este caso, con el Peñón durante el siglo XVIII,
pues a sus facultades financieras y mercantiles sumaban el cono-
cimiento que tenían del idioma utilizado en España ; de ahí que el
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catedrático López de Ayala afirmara en 1782 que los judíos gibral-
tareños «hablan bien o mal el castellano ». En torno a la especiali-
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zación de los hebreos en este tipo de actividades económicas que
conectaban a Marruecos con Europa se pronunciaba la obra titu-
lada El viajero universal, editada a fines del setecientos: «Los judíos
son los factores de este comercio, y sacan grande ganancia, porque
aquí los judíos son tan industriosos y aún más pérfidos que los de
qualquiera otra parte. Los judíos descienden de los que fueron
echados de España y de Portugal, y conservan aún la lengua de
estos dos reynos» .
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Ciertamente, el tráfico mercantil entre el Magreb y las colonias de
Menorca y Gibraltar fue frecuente durante el dominio inglés, especial-
mente con los puertos de Marruecos y Argel , pues los judíos los con-
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virtieron en la plataforma de aprovisionamiento de las fuerzas milita-
res instaladas en ambas colonias y de la población en general. En todo
caso, junto a hombres de negocios que desarrollaban el comercio entre
los dos lados del Estrecho también se aprecia en Gibraltar una red de
tenderos practicantes de la fe mosaica que ejercían la venta al por
menor . Sin duda, el desarrollo de esta actividad marítima generó que
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la compra-venta de embarcaciones y los préstamos financieros para
su adquisición se constituyeran en negocios muy lucrativos para los
hebreos; así sucedió principalmente en la isla balear, según se aprecia
en las escrituras notariales, pues su condición de cruce de las rutas
marítimas mediterráneas y la existencia de un astillero destinado a la
Royal Navy ofrecía múltiples posibilidades de obtener ganancias invir-
92 Y. Frenkel, Fuentes hebreas y árabes para el estudio de la historia de los judíos de
Marruecos, en M. García-Arenal (ed.), Entre el Islam y Occidente. Los judíos magrebíes
en la Edad Moderna, Casa de Velázquez, Madrid, 2003, p. 295. L. Maziane, Les juifs
marocains sous les premiers sultans alawites, en M. García-Arenal (ed.), cit., p. 304.
93 I. López, Historia de Gibraltar cit., p. 374.
94 E. Laporte, El viagero universal o noticia del mundo antiguo y nuevo, vol. I, Im-
prenta de Fermín Villalpando, Madrid, 1796, p. 158.
95 Ags, Estado, leg. 6914, exp. 137. M. Morcillo, Los judíos de Menorca durante la
segunda mitad del siglo XVIII a través de los protocolos notariales de Mahón (1751-1802)
cit., pp. 74-75, 82-83 y 95.
96 Sobre ellos y sus actividades en Gibraltar expresaba la siguiente opinión un aca-
démico coetáneo: «Los judíos son por la mayor parte tenderos o corredores, tan puntua-
les allí como en todas partes en engañar, i prestarse a las logrerías más enormes». I.
López, Historia de Gibraltar cit., p. 373.
Mediterranea - ricerche storiche - Anno XVIII - Agosto 2021
ISSN 1824-3010 (stampa) ISSN 1828-230X (online)