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624 Darío G. Barriera

habían dejado todo librado a la guerra y seguían practicando el co-
mercio como colaboración: muchos comerciantes franceses instalados
en Cádiz trabajaban para ingleses . Las cifras que presenta Carlos
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Malamud revelan una correlación entre la actividad del sistema de flo-
tas y galeones y las re-exportaciones francesas a través de este medio.
Esto sugiere que, además de las tensiones existentes entre las mo-
narquías (o entre banderas), había diversos tipos de disensos entre
otros agentes. Las preferencias por el comercio directo entre provee-
dores y distribuidores que trataban de ser eludidos (los grandes co-
merciantes asentados en suelo americano, tanto en México como en
el Perú ) o el peso de los miembros de las diferentes Compañías en
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los espacios cortesanos complejizaban relaciones de cooperación que
podrían parecer obvias o suavizaban enfrentamientos que a priori po-
drían ser estimados como descarnados.

2. Restañar el imperio: un lugar para la Nueva Acadia

La disminución de territorios coloniales en el Atlántico norte y el
Caribe sufrida por la corona francesa en 1763 fue bastante drástica.
Las derrotas de 1759 en la región del Québec llevaron a algunos agen-
tes de la monarquía francesa a buscar compensaciones para esas mer-
mas territoriales. Pero a los ojos de los colonizadores, las poblaciones
de las islas del Caribe no presentaban –como las del Canadá– un ho-
rizonte de integración posible con sus colonos . Las costas rioplaten-
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ses y patagónicas del Atlántico Sur –con las cuales los mercaderes
franceses mantenían intensas relaciones desde mucho tiempo atrás ,
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14 C. Malamud, El comercio cit., p. 35.
15 G. Walker, Política cit.
16 A. Pagden, Señores de todo el mundo. Ideologías del imperio en España, Inglaterra
y Francia (en los siglos XVI, XVII y XVIII), Península, Barcelona [1995], p. 182.
17 Incluyendo, como es bien conocido, un plan varias veces retomado para conquis-
tar la ciudad de Buenos Aires: B. de Massiac, Plan francés de conquista de Buenos Aires
(1660-1693), trad. y estudio introductorio de M. de Ridder de Zemborain, Emecé, Bue-
nos Aires, 1999; E. Dahlgren, Voyages français à destination de la mer du sud avant
Bougainville (1695-1749), Nouvelles archives des Missions scientifiques et littéraires, Im-
primerie Nationale, París, 1907 y Le commerce de la Mer du Sud jusqu'au la paix d'Utre-
cht, Honoré Champion, París, 1909. R. Caillet-Bois, Una tierra argentina. Las islas Mal-
vinas, 3era edición, Academia Nacional de la Historia, Buenos Aires, 1982 [1948], p. 30.
subrayó la colaboración entre algunos navegantes franceses con el virrey del Perú en
ocasión de los ataques de William Dampier (1704). Durante el siglo XVII, si bien el 50%
de las arribadas al puerto de Buenos Aires para practicar el comercio directo correspon-
día a navíos holandeses, la mayor parte de los productos que entraban legalmente em-
barcados y reexpedidos desde Cádiz provenían de Francia. Z. Moutoukias, Contrabando
y control colonial, CEAL, Buenos Aires, 1988, pp. 121-128.

Mediterranea - ricerche storiche - Anno XVIII - Dicembre 2021
ISSN 1824-3010 (stampa) ISSN 1828-230X (online)