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La colonización francesa de Malvinas en el Atlántico Sur (1764-1767)   625


                    en cambio, no parecían un problema. Estaban bajo la jurisdicción de
                    otra monarquía gobernada por la dinastía de Borbón, y por eso mismo
                    al amparo del tercer pacto de familia, suscripto en 1761, lo que podía
                    funcionar como paraguas ante cualquier conflicto . Esto, sumado a
                                                                      18
                    la acumulación de hipótesis favorables acerca de la posibilidad de des-
                    cubrir la quinta pars o la terra australis –pacientemente instalada du-
                    rante dos siglos en el verosímil geográfico y político que caracteriza a
                    la coyuntura – fue clave para que ese escenario fuera considerado
                                 19
                    favorable para las nuevas empresas coloniales. La ubicación en los
                    mares australes del emplazamiento que más gloria podría otorgar a
                    un «monarca moderno» –el francés que, además debía disputarlo al
                    inglés, que ya se había lanzado a la labor– había sido señalado con
                    toda claridad por Charles de Brosses en 1756 .
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                       Según Christopher Hodson, para Bougainville lo más importante
                    no era sin embargo encontrar el sitio donde instalar esa población,
                    sino determinar cómo organizar sus relaciones interculturales . Para
                                                                                 21
                    el establecimiento de esta nueva Acadia, Louis Antoine de Bougainville
                    planteó y ejecutó un proyecto que contó con la aprobación de Luis XV
                    y del duque de Choiseul, quien participó activamente en la gestión
                    de su financiación . Dom Pernetty –capellán, historiador natural y
                                       22


                       18  La correspondencia entre el gobernador Viana de Montevideo y Carlos III con mo-
                    tivo de la visita de Bougainville al puerto rioplatense muestra no obstante –como se
                    ofrecerá más adelante– los límites que podía encontrar este optimismo.
                       19  C. Lois, Terra incognitae. Modos de pensar y mapear geografías desconocidas, Eu-
                    deba, Buenos Aires, 2018, pp. 59-69; Carolina Martínez, Mundos perfectos y extraños
                    en los confines del "Orbis Terrarum": Utopía y expansión ultramarina en la modernidad
                    temprana (siglos XVI-XVIII), Miño y Dávila, Buenos Aires, 2019.
                       20  En las primeras páginas del tomo I. Estos párrafos también fueron rescatados por
                    R. Saiegh, Francia en las Islas Malvinas, Emecé, Buenos Aires, 2005; G. Martínez Ca-
                    sado, Malvinas, nuestro legado francés, Argenta, Buenos Aires, 2010; C. Martínez y M.
                    López Palmero, Ambición colonial, propaganda anti-española y mercado editorial en la
                    Europa  de  los  siglos  XVI-XVIII.  Los  casos  de  Inglaterra  y  Francia  en  la  disputa  por
                    América, «Anuario del Centro de Estudios Históricos “Prof. Carlos S. A. Segretti”», XII,
                    12, 2017, pp. 97-118; C. Martínez, Revelaciones de un manuscrito francés sobre las islas
                    Malvinas: Louis-Antoine de Bougainville en los contornos de la América hispana (1767),
                    «Corpus», 7 (2), 2017, DOI : 10.4000/corpusarchivos.1928, p. 4, sugiere una posible
                    incidencia de este texto en la empresa encarada por Bougainville.
                       21  Ch. Hodson, The Acadian Diaspora. An Eighteenth-Century History, Oxford Uni-
                    versity Press, Oxford, 2012, p. 122.
                       22  Del encuentro de Bougainville y Choiseul en el gabinete de este último durante
                    1763 se ocupa Martin-Allanic, Bougainville, cit., cap. IV. Antes del envío del proyecto,
                    Choiseul había ofrecido a Bougainville la gobernación de Guyana, que estaba vacante
                    (Saiegh, Francia, p. 143). Julius Goebel sostenía en 1927 que esto fue un proyecto de
                    Choiseul, quien «emprendió la reorganización del imperio colonial francés mediante la
                    creación de nuevas colonias en aquellos lugares no ocupados aún por otras naciones».
                    J. Goebel (h) La pugna por las Islas Malvinas. Un estudio de la Historia Legal y Diplomá-
                    tica, Municipalidad de Buenos Aires, 1982 [1927].


                                              Mediterranea - ricerche storiche - Anno XVIII - Dicembre 2021
                                                           ISSN 1824-3010 (stampa)  ISSN 1828-230X (online)
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